Disculpe; su abrigo y su sombrero, son solo un par más.

Entra en mis entrañas, cuando aún, noto las legañas.

Depura mi locura, apacigua mis trincheras.

Las lanzas están preparadas, los ecos nacen en las montañas y respiro el ser de mis derrames esteriotipados.

Rompo como lluvia en mi lengua oscura, en mis visiones únicas y este dichoso don, que no es de palabra.

Visualizo canas en ese, tu reflejo, que utilizo de glamuroso espejo y muestras marchita tu edad.

Maduro fruto caído, pensamiento de dificil amor, que me hace de armas tomar.

Me ausento en tu mundo marinero y logrado he mi objetivo.

Pues... no quiero tu parte, pero si un fragmento conmigo.
(Todo es justo como necesito)

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